La mayoría de los estadounidenses no consume suficientes nutrientes en su dieta diaria. De acuerdo con un artículo publicado en la revista científica American Journal of Clinical Nutrition, tan sólo un uno por ciento de la población cumple los requerimientos mínimos para tener una dieta equilibrada. Por eso, para muchos de nosotros – especialmente si estamos haciendo régimen, tenemos más de 50 años, estamos embarazadas o practicamos ejercicio – puede ser beneficioso tomar un suplemento adecuado a nuestras necesidades.
Muchos estadounidenses tienen niveles deficitarios de una o varias vitaminas; esto significa que consumen las cantidades necesarias para evitar una deficiencia, pero no las suficientes como para tener una nutrición óptima.
Estos cinco suplementos no deberían faltar en ninguna lista de la compra:
Vitaminas. Los nutrientes que obtenemos de los alimentos forman un conjunto, por lo que si su dieta es baja en un determinado nutriente, lo más seguro es que también lo sea en otros. Un suplemento vitamínico es una forma cómoda y barata de alcanzar un equilibrio de nutrientes y de evitar al mismo tiempo las deficiencias secundarias que pueden aparecer cuando se consume mucho un nutriente en detrimento de otro. Para estar seguro de la calidad, elija marcas conocidas o un producto con el sello USP que garantice unos altos estándares.
Ácido omega-3 DHA. Si su consumo de pescado azul (salmón, caballa o arenque) no llega a las dos raciones por semana, tome un suplemento de omega-3. Se necesitan al menos 250 miligramos del ácido omega-3 DHA, puede que incluso 900 miligramos al día, para ayudar a mantener la salud del cerebro.
Los ácidos omega-3 son importantes para las mujeres embarazadas o en el periodo de lactancia, ya que el DHA es un componente esencial para el desarrollo del cerebro del bebé. De hecho, el DHA conforma el 97% de los ácidos omega-3 presentes en el cerebro. También existe una fuente vegetal y sostenible de DHA a partir de algas en forma de complemento alimenticio. Busque el logotipo de life’sDHA en el envase para estar seguro de que se trata de una fuente vegetal.
Calcio y magnesio. Necesitamos el calcio para mantener en forma los huesos, los nervios y los músculos, mientras que el magnesio es importante para combatir el estrés. A menos que su dieta incluya por lo menos tres porciones diarias de productos ricos en calcio, leche de soja enriquecida y una gran cantidad de soja, frutos secos y germen de trigo ricos en magnesio, debería tomar complementos alimenticios de estos dos minerales.
El calcio y el magnesio se absorben y utilizan mejor cuando se suministran en una proporción de dos partes de calcio y una de magnesio. Una parte de estos minerales se obtiene a través de los alimentos, por lo que sólo es necesario cubrir las carencias con un suplemento que contenga 500 miligramos de calcio y 250 miligramos de magnesio, en caso de que su complemento vitamínico sea bajo en estos minerales.
Vitamina D. Si usted es un adulto, sería conveniente que se planteara tomar un suplemento de vitamina D, ya que lo más probable es que no obtenga suficiente a través de los alimentos y las bebidas.
Vitamina E. La principal función de la vitamina E es la de antioxidante liposoluble que protege las células, los tejidos y los órganos del daño causado por los radicales libres.
Consulte a su médico antes de incorporar complementos alimenticios a su dieta.